Se aproxima la fiesta de la Inmaculada. María te habla al corazón ¿quieres abrirle tu puerta?
Os hablo desde el cielo. Pero no penséis que el cielo está
allá arriba. No. El cielo está en todas las partes donde la gente se quiere
Mi nombre,
como sabéis, es María, pero también me llaman Inmaculada. Todos los nombres
significan algo: "Emmanuel" significa "Dios con nosotros".
Ángel significa "mensajero" o "enviado"…
¿Sabéis lo
que significa "Inmaculada"? Pues significa "sin mancha", es
decir, que tiene un corazón limpio y puro, sin ninguna mancha ni defecto. Me
llaman así porque en mi corazón no hay ningún mal, no existe la maldad en mí.
Entre Dios y yo no ha habido nunca ningún obstáculo, ni muro, ni puerta cerrada
que no le dejara pasar. Entre Dios y yo siempre ha habido un camino limpio y
puro.
Yo era una
niña como las otras. Hacía lo que todas las niñas: jugaba, leía, ayudaba mi madre y hablaba con Dios. Dios y yo
siempre estábamos juntos y, cuanto más hablaba con Él, más se acercaba Él a mí.
Cuando crecí, mi corazón y Dios estaban muy unidos y una mañana oí su voz que
me decía que dentro de mí iba a estar Jesús, que yo iba a ser su madre. Dios me
estaba preparando desde pequeña y me había regalado un corazón limpio y puro
para que le sirviera de cuna a Jesús, un corazón tan cercano a Dios que Él lo
eligió para hacerse hombre. No había ningún obstáculo. Estaba preparado para
recibirle, con todas las puertas abiertas de par en par. ¡Y si supierais qué
feliz era yo cuando sentía a Jesús dentro de mí!
Ánimo..que
estos días que os preparáis para mi fiesta ,os dediquéis a abrir una a una las
puertas de vuestro corazón ,mediante la fe y las buenas obras..¡Ya veréis
cuanta alegría vais a tener!
Os quiero muchísimo.
María
de Nazareth
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